Espejismos

Estaba prepárandome para ir a la cama, a eso de las 2 de la mañana. Padezco de insomnio, pero ya no causa molestia alguna, vió como la gente se acostumbra a los cambios de horario, no? Bueno yo soy un ave nocturna, un búho diría yo pero prefiero a los murciélagos. Pese a que los búhos tienen esa connotación misteriosa y emblemática, relacionada con aquellos astronautas del espacio sideral, los murciélagos tienen ese "no sé qué" que les sienta tan bien y los hace únicos.
Es decir, qué otro animal ocuparía pantallas grandes y chicas, libros y noticias con semejante magnitud? Creo que ni Lassie ni Rintintín igualan la captación que generan estas criaturas de la noche. Por supuesto que hablo de las miles de conexiones que le adjudican a estos seres algún parentesco con el señor de la noche, el Conde Drácula.
Ejem, me desvíe del tema. Es que me emociono cada vez que menciono a ese señor. Sí, lo sé, muy trillado el asunto, pero repito, tiene ese "no sé qué" que despierta la curiosidad en miles de humanoides, sin discriminación de género y edad. Es simplemente una leyenda inocua, sólo afecta a la imaginación. Excepto a aquellos que sufren de miedo, a ellos les recomiendo abstenerse de historias ancestrales si es que sufren problemas cardíacos.
Miedo...
Miedo, miedo, miedo.
Esa palabra me da vueltas por la mente. Gira, suba, baja, se esconda, salta, VUELA.
No, no consumo ningún tipo de droga. Creo que si lo hiciera mi mente estaría en el más allá y no cerca del "más acá". Aunque para serte sincero, tampoco se encuentra ahí, sino que permanece en el medio y juega a ser un péndulo. Acá, allá, acá, allá. No no, acá, acá, ACÁ. A veces se escapa de mis manos y es difícil atraparlo. Volver a la realidad no es tarea sencilla, no señor. Menos cuando uno está cu-cú y no distingue una manguera de un elefante escupe sangre. Exacto, al igual que el gran Don Quijote de la Mancha creía ver un monstruo y no un molino de viento. A eso yo le llamo volar como un águila y estrellarse contra la primer montaña que perdió de vista.
Bueno, yo no considero estar cu-cú, soy como una especie de cuervo. Nadie quiere a los cuervos, excepto los más excéntricos. Usted no parece ser parte de ellos, o me equivoco? No es relevante tampoco, perdone pero su existencia poco me importa, es la de aquel ser la que me hace perder la cordura.
Déjeme hacer una pequeña aclaración, que diga que pierda la cordura no significa que literalmente lo haga. Eso diría una persona normal, pero como no lo soy, tómeselo literal.
No, no me considero un loco, al menos eso creo yo y espero que usted no diga lo contrario. Tan sólo soy algo peculiar.
Retomando a lo anterior, ah.. el miedo. Pf, hay quienes creerán que se trata de una buena película de monstruos o algún que otro poltergeist bien elaborado. Oh no, no, no. No mi querido amigo, ESO no es miedo.
El miedo es un sentimiento de ahogo, yo como un estúpido pretendo escaparle escondiéndome debajo de las sábanas, como si fuera una fortaleza inquebrantable. Eso es, es escaparle a la vida. Es que sí, es más fácil huir y volver por el cámino fácil, que seguir aquel lleno de arañas. Entiéndase que le tengo fobia a las arañas, por eso la ruta está repleta de ellas. Jamás se me ocurriría pasar por ahí, jamás de los jamases.
El miedo no es por la muerte, al menos no en mi caso. Es miedo al fracaso, a perderlo todo. Miedo a crecer. Que tengo complejo de Peter Pan lo tengo bien asumido, no hace falta que me lo eche en cara una vez más doc. Miedo a quedarse atrás, a no superarse día a día.
El miedo es encogerse hasta desaparecer y puf, aparece el terror. Y el terror no es más que simplemente la máxima expresión de este miedo, es decir, caer en ese precipicio lleno de tarántulas (ahora ya sabe lo de la fobia, no hace falta explicar) y descubrir que de tus entrañas comienzan a explotar sus huevos y de par en par empiezan salir por todos tus orificios, hambrientas de carne magra.
El terror te lleva al pánico, y ding ding ding, suena la campana porque tenemos un ganador! De eso se trata todo. PÁNICO.
Mire, si supiera lo que es el pánico se lo diría, pero ya no soy un diccionario que habla ni un filósofo que cobra barato. Sólo se que no se lo deseo ni a mi peor enemigo. Bueno, quizás tan sólo una probadita no le haría mal pero no viene al caso. El pánico es un conjunto de paranoias que se superponen y derivan un estado mental psicótico que despierta los temores y los instintos más perturbadores de cualquier alma.

Pasadas las cuatro de la mañana logré superar el insomnio, el miedo, el terror y el pánico.
Pero la paranoia camina a mi lado, tomando mi mano.
El doctor no respondió ni una sola palabra luego de que divulgué media hora más sobre el no-sentido de las cosas.
Me lavé la cara y me vi frente al espejo.


- Todo este tiempo estuvo hablando consigo mismo - respondió.